Un año más, no es un día, ni un mes concreto pero sí hay fechas señaladas donde toma quizá más peso el recuerdo, aunque siento, y rescato la palabra «peso».
Considero importante la existencia de las fechas marcadas para visibilizar y sensibilizar socialmente sobre el duelo gestacional y perinatal, de igual manera que otras situaciones sociales tienen una fecha destacada, de unión, de concienciación. Pero, rescató la palabra «peso» pues tras 6 años de la muerte de Iris, cada día la recuerdo, la siento, la pienso, cada día le amo un poco más en la manera que la vida, que nuestra historia, nos ha posibilitado y aunque persisten la sonrisa y las lágrimas al recordarla, va pasando el aire y seguimos fluyendo, caminando, viviendo, en cambio, el día 15 reconozco que el recuerdo me conecta más con la ausencia, con lo que no pudo ser, y, por ello, creo me pesa más.
Pero insisto, siento que es una fecha importante, nos reúne, y agradezco y ánimo a todo el mundo a encender una vela De luz para cada uno de esos bebés que murieron de manera temprana y para acoger e impulsar a sus familiares.
Únicamente este año, quería compartir este sentir, para que no olvidemos que es un proceso del día a día, que el día 15 es una jornada » hacia fuera» pero, que durante todo el año, permanecemos «hacia dentro», y los familiares aprendemos a «soltar amando» a nuestros hijos/as fallecidos, sin dejar de apoyar a los hospitales en la atención ante la muerte temprana, escucharnos y acompañarnos entre madres y padres en el duelo, documentados en legislación y reivindicar mejoras, solidarizarnos con otras poblaciones de riesgo o vulnerables, cuidar y amar a nuestros hijos/as y familiares vivos, ejercer nuestras vocaciones…en definitiva seguimos caminando la vida comprometidos.
Hoy, a las 19.00h, iluminaremos de nuevos nuestros hogares e inundaremos de amor las almas del mundo entero.

Laura Pueyo Pardo