Otro motivo más para fomentar el embarazo con conciencia: Cada segundo que viví contigo me llena de amor y luz para seguir cada día y recobrar energía, para crecer como persona y, como parte de este TODO en el que vivimos, construir, transformar, colaborar, comprometida con la VIDA, descubriendo cada día un poquito más de mi SER, colaborando con los otros desde mi ESENCIA.

Que feliz soy de haber disfrutado de cada momento contigo, sentirte en mi interior, escucharte, cantarte, hablarte, contenerte, reposar mis manos acariciándote sobre mi piel…pero sobre todo, que feliz de que me escogieras para ser tu mamá.

Te presenté sabores, olores, sonidos… junto a papá fuimos a visitar el mar, te dediqué canciones y danzas, me regalaste caricias profundas, me divertía viendo tus gestos en las ecografías, me hacías reír cuando jugabas con la perrita, los otros niños sonreían con tus patadas y miraban asombrados tus movimientos, disfrutaba con la expresión de tus emociones, tu hipo, me inspiraste a la hora de acompañar a familias, niños y alumnos en el trabajo, te mostraste preciosa ente la familia y amigos, participaste de los disfraces infantiles del pueblo…

 

No voy a valorar si ha sido poco o mucho tiempo, pensar en ello me genera sufrimiento, en cambio recordaré cada día algún instante vivido contigo, y entonces podré sentir AMOR, SERENIDAD y AGRADECIMIENTO. 

¿El tiempo? Por supuesto me hubiera encantado fuera más largo, seguir conociéndonos, verte crecer,” comerte” a besos…, pero junto a ti he descubierto algo grande: Ahora sé lo que es, el AMOR INCONDICIONAL. Y además, he podido vivir lo mágico de tu nacimiento y la experiencia única de ser madre por primera vez.

Por todo ello, hija, me siento alegre de haber decidido vivir con conciencia cada segundo del embarazo, pues son estas vivencias junto a ti las que llenan mi corazón y me dan amor y calma cuando te echo de menos. Gracias a la vivencia plena de este gran embarazo contigo, puedo ahora colocarte en mi corazón y continuar en la VIDA, DIGNIFICARTE y TRANSFORMAR con nuestra semillita, un trocito de Universo.

Hoy, en un día de recuerdo para los bebés que no pudieron nacer vivos, en un día de concienciación con la existencia del duelo gestacional y perinatal, cuando hace unos meses que mi hija Iris nació sin que su corazón latiera ya, quiero nombrarla a ella y animar a las demás personas a tener un pensamiento, a nombrar, a aquellos bebés que un día, tempranamente, no pudieron continuar con esta vida.

“La vida es tan solo el discurrir de un instante tras otro, y debe valorarse por la intensidad con que se vive, no por su duración”

 

Bajo el árbol amigo: GRACIAS HIJA