Sobre Mí

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Mi nombre es Laura y actualmente vivo en el municipio de Arguis, rodeada de naturaleza, junto a mi compañero, mi pareja, mi cómplice con quien decidí construir un proyecto de vida en común.

Juntos vamos descubriendo “los colores” de la maternidad y la paternidad. En agosto del año 2015 nació nuestra primera hija en común, Iris, tras un bello embarazo, consciente, sentido y disfrutado segundo a segundo, la acogimos en nuestros brazos, sin latido, sin vida, armándonos de valor y de amor para despedirla ese mismo día, aprendiendo a maternar, paternar y amar como nunca antes habíamos escuchado ni imaginado, aceptando la muerte como un continuo y no como un final. Dos años después, un 14 de febrero soleado, nacía nuestro hijo Yuriel, pura luz, y, en junio del año 2019, nacía al amanecer, Haniel, alegría permanente, ambos traían infinidad de aprendizajes para nosotros.

Hoy, gestando un nuevo ser, seguimos creciendo, transformando y evolucionando como padres, como niños que fuimos, como profesionales, como personas y como familia.

Agradezco una niñez en la cual me sentí acompañada, respetada, y, sobre todo, libre. Desde muy pequeña expresaba mi predilección por los bebés, disfrutaba abrazando, meciendo y cantando a los más chiquitos. La ilusión por relacionarme y acompañar a niños/as, tanto como madre, como en mi profesión ha brillado continuamente en mi esencia.

Tras una adolescencia rebelde, curiosa y exploradora, en busca de un lugar real para “la diferencia”, me fui encontrando en la vida con personas con autismo, parálisis cerebral, síndrome de Down, dificultades en las relaciones sociales…y decidí que quería continuar mis estudios y encontrar mi vocación, buscaba una profesión humana, cercana a las personas, una profesión holística hacia el ser humano, que concediera valor a la Historia de cada individuo, que facilitara su independencia, que dejara lugar al deseo particular que fomentara la vida y la convivencia diaria con la creencia de poder APORTAR TODOS, DE SUMAR, DE MIRARNOS CON EL CORAZÓN.

En 1999, inicié la carrera de Terapia Ocupacional, estudié en la Escuela de Ciencias de la Salud de Zaragoza, y sí, había encontrado mi vocación.

Nada más terminar los estudios universitarios me trasladé a vivir a Mallorca para poder trabajar en el ámbito pediátrico, nueve años allí aprendiendo y creciendo como persona y profesional, junto a menores con diferentes dificultades, junto a sus familiares, descubriendo amistades verdaderas, amores incondicionales y, encontrando grandes profesionales para compartir y continuar mi formación.

Nunca he parado mi formación, no he dejado de auto-observarme, de revisarme , tanto a nivel personal como profesional, me fui especializando cada día más en atención temprana, me formé como Psicomotricista, educadora de masaje infantil, educación y prevención en la etapa perinatal, modelo de Ocupación Humana, evaluación y tratamiento oro-facial y miofuncional, y cada vez, más consciente de la importancia de mirar al niño junto a su familia, inicié mis estudios de Psicología, me especialicé en Pedagogía Sistémica, y, conforme, observaba y acompañaba a niños más pequeños, escuché de nuevo esa vocación, esa misión, esa facilidad interna para comunicarme y conectar con los bebés, y descubrí, que podía dar un paso más acompañando desde una atención no solo temprana sino más importante aún, OPORTUNA, única para cada niño/a y su familia. Así, me especialicé en los cuidados centrados en el desarrollo y el método Nidcap, en valoración neurológica y detección de signos de alarma del neonato y en estimulación refleja neuromotora.

Los últimos años durante la crianza y cuidados de mis hijos, he continuado mi formación estudiando educación infantil y especializándome en pedagogías activas con la realización de cursos en pedagogía Waldorf y Montessori entre otros.

Todos estos años he trabajado en Atención Temprana como Terapeuta Ocupacional y Psicomotricista, desde el año 2010, residiendo de nuevo en Aragón, donde compagino la maternidad con mi trabajo, tanto en Fundación Down Zaragoza, como en la Asociación, que gesté y fundé en el año 2014, La mirada de Lluna que colabora con distintas entidades en Huesca, Zaragoza y Teruel, y, persigue, sensibilizar sobre la importancia de la PREVENCIÓN de dificultades en la infancia y, acabar, con las experiencias familiares de soledad y angustia, que traduzco en un sentimiento indeseable de “ESTAR EN TIERRA DE NADIE” mientras esperan a ser atendidos y acompañados.

Una de mis pasiones ha sido viajar para compartir, observar y descubrir otras culturas, otras formas de vida, otras maneras de estar. He residido, aprendido y cooperado en diferentes lugares y con distintos proyectos, generalmente dedicados a infancia con dificultades o riesgo de padecerlas, países como Guatemala, Togo, Benin, Honduras, México, El Salvador, El Sáhara y, durante 6 años consecutivos en Etiopía. Algunas de las vivencias más importantes para mi ser y mi crecimiento han sido allí, junto a cientos de personas que nos ayudan a desarrollarnos.

Como docente he trabajado y colaboro con la Universidad como profesora de prácticas, acompaño alumnos en sus TFG y participo en charlas y talleres tanto en Terapia Ocupacional como en Educación y Fisioterapia. Imparto formación en psicomotricidad vivenciada y relacional desde centros de formación diversos como Psicopraxis, CIFE, FSIE, Universidad Complutense, Coptoa, etc.

Y, sobre todo, soy afortunada de haber encontrado mi vocación y de poder ejercerla, y, estoy, enormemente agradecida a la vida por cruzarme en el camino con bellas personas que tanto me han ido aportando, y, que me han enseñado el valor de mirar en mi interior, auto-observarme, revisarme, formarme…y después, dar y recibir, sin esperar nada a cambio, desde el amor incondicional.